Abstract:
La presente investigación tuvo como objetivo general determinar las relaciones entre el crecimiento económico y los indicadores de desarrollo humano sostenible (DHS)1 en Honduras, desde el período en que fue aprobada la última Constitución de la República (año 1982). La Tesis de la Tesis se definió de la siguiente manera: El crecimiento económico que ha mantenido Honduras desde el año 1982 ha tenido una alta relación con las mejoras en algunos de los indicadores del desarrollo humano sostenible. No obstante, no se han logrado niveles aceptables de bienestar para la población. En la búsqueda del concepto de desarrollo, se encontró que: Después de la segunda guerra mundial hubo un gran interés académico en temas de desarrollo, el que coincidió con un interés político en esta materia, reflejado en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En el preámbulo y en el Artículo 55 de la Carta de las Naciones Unidas se manifestó la decisión de los países de promover: el progreso, el desarrollo económico y social, y elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad (ONU, 1945). En 1954 un grupo de expertos convocados por la ONU emitieron el Informe sobre Definición y Medición Internacional de Estándares y Niveles de Vida. Dicho informe consideró que, para promover el desarrollo, se deberían establecer objetivos generalmente aceptados, y definir políticas económicas a nivel internacional en áreas particulares como: salud, nutrición, vivienda y educación. En 1961 se realizó una actualización de este informe, en la cual trabajaron en forma conjunta: la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, la Oficina Internacional del Trabajo, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, y la Organización Mundial de la Salud. En el nuevo documento se definieron como componentes del nivel de vida o de desarrollo: 1) Salud, 2) Consumo de alimentos y nutrición, 3) Educación, 4) Vivienda, 5) Seguridad social, 6) Vestido, 7) Esparcimiento y 8) Libertades humanas (ONU, 1961). Alrededor de estos componentes, en el transcurrir de casi 60 años se han dado diferentes conceptos como: desarrollo humano, desarrollo económico y social, y se ha incluido el tema de sostenibilidad ambiental. Finalmente, en el presente trabajo se logró construir el concepto de DHS de la siguiente manera: El Desarrollo Humano Sostenible se centra en el ser humano y en el desarrollo de sus capacidades a fin de que logre su bienestar de forma individual y colectiva, de manera sostenida. Este bienestar se debe reflejar en satisfacción de necesidades como: alimentación, vivienda, salud, educación, cultura, libertad, seguridad, felicidad, etc. Lo anterior implica promover un crecimiento económico, cuidando el medio ambiente y con la visión de que los recursos son finitos, por lo que de manera paralela se deben orientar los esfuerzos en la reproducción del ecosistema. Este crecimiento económico debe generarse o distribuirse entre los más desposeídos a fin de lograr equidad en la distribución de los ingresos, teniendo en cuenta el aumento poblacional. Se hizo referencia al crecimiento económico partiendo de la concepción de que consiste en el aumento de la producción de bienes y servicios, la cual se refleja en el Producto Interno Bruto, según el estándar internacional para medir el PIB contenido en el Sistema de Cuentas Nacionales. Metodología de la Investigación: Para realizar el trabajo se recolectaron datos numéricos de los indicadores de las variables identificadas y se buscaron relaciones entre elementos, por lo que, la investigación se definió con un enfoque cuantitativo y con un alcance de tipo correlacional. El estudio se basó en recolectar datos para posteriormente analizarlos y sin ninguna manipulación, por lo tanto, la investigación se enmarcó en un diseño de tipo no experimental. Por su dimensión temporal, el diseño se clasificó como longitudinal o evolutivo – tipo de tendencia (trend). Se determinó que los datos por evaluar serían los resultados numéricos obtenidos en sus indicadores al final de cada período, durante el 100% de los años transcurridos en el período 1982 – 2018, por lo que, en cada variable se obtuvieron más de 30 datos; número aceptable por los estadísticos para este tipo de análisis (Mason, 1996) y (Levin, 1996). Se analizó el comportamiento histórico de los datos de la Variable - Medio (Crecimiento Económico) y se comparó con las otras Variables. Por otro lado, se hizo el análisis de correlaciones de variables, revisando el cumplimiento de requisitos para correlacionar, por lo que se evitó presentar correlaciones espurias (Mason, 1996). Las variables para estudiar se obtuvieron basándose en el marco teórico. En el logro de los objetivos del desarrollo intervienen diferentes medios, por lo tanto, las variables de análisis se clasificaron como Variables – Medios, y Variables – Objetivos del desarrollo. Las Variables – Medios incluyen: crecimiento económico, distribución del ingreso (se incluye la variable población), y sostenibilidad ambiental. Las Variables – Objetivos del Desarrollo se catalogaron como Materiales e Inmateriales. Las Materiales representan la satisfacción de necesidades básicas como: nutrición, vivienda, salud y educación; y las Inmateriales reflejan la salud psicológica. Principales Resultados: El PIB Real en Honduras en el período 1982 - 2018 pasó de Lps. 57,080 millones a Lps. 214,705 millones, resultando un crecimiento económico en promedio anual del 3.6%. Durante este período el número de habitantes del país también fue aumentando paulatinamente, de tal forma que de 3.9 millones en 1982, llegó a 9.6 millones al año 2018, con un crecimiento poblacional promedio anual del 2.48%. La tasa de crecimiento económico superó a la tasa de aumento de la población. El indicador de Gini de 0.595 en 1989 mejoró a 0.528 al año 2018. En el período analizado también se incrementó el uso de energéticos. El aumento poblacional se puede dirigir en dos vías: a) personas que se suman a los que han alcanzado niveles aceptables de desarrollo y b) personas que se suman a los que viven en condición de pobreza. Los resultados del análisis de comparación de tendencias de las series históricas, gráficos de dispersión y valores de correlaciones arriba de 0.95, permitieron concluir que, en Honduras, el crecimiento económico presentado durante los últimos 37 años sí ha tenido un alto grado de asociación con las mejoras en indicadores de desarrollo, por ejemplo: En el período 1982 – 2018 se logró subir el número de: personas no subnutridas, casas con paredes de ladrillo, esperanza de vida, niños que asisten a la escuela, población no pobre y el indicador de desarrollo humano; asimismo se disminuyó la tasa de mortalidad infantil y las viviendas construidas con varas y desechos. No obstante, en el período 1982 – 2018, de manera paralela producto del incremento poblacional, aumentó el número de: personas subnutridas, niños que no asisten a la escuela, y la cantidad de personas viviendo en condición de pobreza. En el año 1988 el 68% del total de hogares del país, (537,140 hogares, aproximadamente 3,2 millones de personas), vivían en condiciones de pobreza; mientras que al año 2018 este porcentaje bajó a 62%, pero el número de los hogares en pobreza subió a 1,306,414 (6.0 millones de personas). El movimiento hacia la baja en la tasa se debe a que aumentó el número total de hogares o la población y no precisamente a que disminuyó el número de hogares viviendo en pobreza. Esto refleja que finalmente no se logró alcanzar niveles aceptables de bienestar para la población. Propuesta de evaluación del DHS: Al buscar cumplir con el objetivo de la investigación de encontrar el grado de asociación entre el crecimiento económico y los indicadores de desarrollo, se encontraron resultados que pueden servir como un diagnóstico multidimensional del desarrollo humano sostenible en Honduras (período 1982 – 2018). Este análisis refiere que el país necesita mejorar en diferentes áreas para alcanzar niveles aceptables de bienestar de la población, para lo cual se deben subir sus niveles de crecimiento económico, cuidando la sostenibilidad ambiental y mejorando la distribución de la riqueza. Hacer propuestas en este sentido es sumamente complejo y debe partir de otros estudios multidisciplinarios; los cuales no forman parte del objetivo y alcance del presente trabajo, el que consistió en analizar tendencias y relaciones entre determinantes del desarrollo. Si bien estos estudios se podrían proponer como líneas de investigaciones futuras2 , el análisis realizado en la presente investigación permitió presentar como aporte una propuesta de evaluación del desarrollo humano sostenible, incluyendo lineamientos como los siguientes: 2 Estos otros estudios deberán indicar cómo debe ser el incremento del Producto Interno Bruto; es decir en cuál área geográfica; qué sectores (los que generan mayor empleo o los que generan poco empleo); quiénes intervendrán (pobres, no pobres, empresas grandes, micro empresarios, o emprendedores); cuánto es el crecimiento requerido; y en qué tiempo. También se deberá contar con análisis que indiquen la manera en que se distribuirá el crecimiento económico a fin de reducir la desigualdad. Por otro lado, al estudiar temas de reducción de la pobreza se deberá partir de análisis que evalúen: área geográfica, quiénes, cómo y cuándo; asimismo evaluar cuáles son las necesidades que requieren mayor atención. Estos análisis también deberán tomar en consideración el tema de crecimiento demográfico. v Partiendo de la complejidad del concepto multivariado del desarrollo humano sostenible, no sería recomendable pretender cuantificar en un solo índice el comportamiento de todos los componentes, por lo tanto, se propone hacer estudios multidimensionales, que comprendan el análisis individual de la tendencia de las variables que intervienen en el DHS. Con esto se tendrá un diagnóstico de las áreas en las cuales se deben enfocar esfuerzos para mejorar las condiciones de bienestar de la población. La propuesta incluye un esquema con el resumen de los factores determinantes del desarrollo humano sostenible, y se brinda mayor explicación y detalle de las variables propuestas para su estudio. En las categorías de estudio hay variables o indicadores que reflejan condiciones favorables y desfavorables. Estudiar el comportamiento de solo una de las dos presentaría resultados sesgados, por lo tanto, uno de los principales aportes como nuevo concepto de la presente propuesta es que, además del análisis de una variable, también se debe realizar “el estudio de la otra variable o la opuesta” dentro de la misma categoría. Se propone hacer los análisis de las tendencias con valores naturales y no solo en términos porcentuales. Seguir el comportamiento histórico de un indicador de una variable objetivo del desarrollo, expresado como porcentaje del total puede dar diagnósticos subjetivos o incompletos. Esto porque al ser el porcentaje el resultado de una división puede moverse por cambios en el denominador y no necesariamente por mejoras en la variable de estudio. Asimismo, el porcentaje se puede mantener en el tiempo si el numerador se mueve de manera paralela con el denominador, dejando de reflejar la mejora o no en el indicador estudiado. En cuanto a la legitimidad de las correlaciones, se debe tener especial cuidado al momento de correlacionar a fin de evitar correlaciones espurias. En este sentido se propone: i. No correlacionar datos expresados en porcentajes de crecimiento. Esto en vista que la fórmula de correlación por si misma incluye cálculos de variación de los valores originales de las variables de estudio. ii. Tomar en cuenta la relación lógica de las variables a correlacionar. iii. Elaborar diagramas de dispersión para evaluar la dispersión de los datos y la forma de la gráfica. iv. Tomar en cuenta los valores críticos o niveles de significancia que dan validez a la correlación.